En la actualidad el estudio de las infecciones vaginales es más común es por ello que el diagnóstico y prevención de las mismas tiene un mayor avance. La vaginosis bacteriana es la vaginitis infecciosa más común. La causa se desconoce. Los patógenos anaerobios que crecen y que aumentan su concentración por 10 a 100 veces y reemplazan a los lactobacilos protectores.
Es posible que tenga flujo vaginal. Este puede ser blanco o de color, puede ser muy leve o intenso y puede tener olor a pescado. Es posible que este olor se intensifique después de tener relaciones sexuales. Algunas mujeres tienen vaginosis bacteriana y no presentan síntomas.
Los factores de riesgo incluyen los de las enfermedades de transmisión sexual, el riesgo se incrementa a medida que el número de parejas sexuales aumenta. Sin embargo, la vaginosis bacteriana puede aparecer en vírgenes, y el tratamiento de la pareja masculina no parece afectar la incidencia posterior en la mujer heterosexual sexualmente activa. El uso de dispositivos intrauterinos también es un factor de riesgo.
La vaginosis bacteriana parece aumentar el riesgo de enfermedades pelvianas inflamatorias, endometritis posaborto y posparto, infección del manguito vaginal poshisterectomía, corioamnionitis, rotura prematura de membranas y trabajo de parto y parto pretérmino. Existen varios tratamientos para la vaginosis bacteriana. El médico puede recetarle píldoras para tomar por vía oral. Es posible que también le recete una crema o un gel para aplicarse en la vagina. Es importante que siga de manera exacta las indicaciones de su médico al usar los medicamentos.
A pesar de que la vaginosis bacteriana no causa gran efecto en la mujer si puede dar inicio para patologías mayores por ende es vital importancia su diagnóstico y tratamiento temprano, y en citorushtc puedes mantenerte actualizado al apuntarte en cualquiera de sus programas. By Jennifer Padilla.
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